jueves, 29 de mayo de 2008

Herencia del fuego




Andrea Luca



Herencia del fuego


Aprendo, desaprendo, me prendo
como la chispa sobre la paja.
Alumbro
y me extingo en la posibilidad de la vela.
Devoro y calcino
cuando el fuego es mi hambre,
también ilumino el íntimo rincón
de la alcoba. Soy llama
que a sí misma se nombra.
Llamada
y llamarada en un bosque bajo el trueno.
soy rayo que ilumina y serpentea
con eléctrica convulsión en la noche
de la sangre. Y humo que se alzará
de mi sombra como un volcán durmiente
donde bailan las pavesas.

3 comentarios:

Narciso del Río dijo...

Maravillosa imagen.

El poema superior.

Besos.

Narciso del Río dijo...

Fuego terrible que devoras y arrasas sueños...de tus cenizas germinara vida despues de la muerte.

colombine dijo...

despues del fuego hay cenizas ...la imagen es bellísima ...

Pero el fuego puede renacer de nuevo , eso siempre...

un beso